Soberbia victoria de Olivo en Alemania

El argentino Renzo Olivo (153) salvó dos puntos de partido y se clasificó a las semifinales del ATP 500 de Hamburgo al eliminar al local y máximo favorito Philipp Kohlschreiber (22) 1-6, 6-0 y 7-5, en 1 hora y 50 minutos de partido. Facundo Bagnis no corrió la misma suerte y fue eliminado en Suecia. 

El festejo final de Renzo Olivo. (Sitio del torneo)

La tercera fue la vencida. El primer sembrado del torneo alemán, Philipp Kohlschreiber, debió lidiar con tenistas argentinos desde el primer día derrotando en el debut a Carlos Berlocq y en segunda ronda a Nicolás Kicker y en ambos casos en tres parciales, ante el chascomusense perdió el segundo set y con el de Merlo el primero. Hoy las cosas parecieron ser sumamente sencillas para el germano quien obtuvo el primer set en 31 minutos pero no resultaron así ya que el rosarino se reveló ganando el segundo en apenas 25 minutos y en el tercero jugaron un tenis de alto vuelo con puntos de excelente factura moviéndose mutuamente de lado a lado de la cancha y los errores ocurrían simplemente por la exigencia del rival.
Olivo cometió demasiadas equivocaciones a la hora de sacar en el primer set ganando menos de la mitad de los puntos lo que le permitió a Kohlschreiber quebrar en el segundo y cuarto juego para establecer una posterior ventaja de 5-0 que fue lapidaria. Increíblemente las cosas cambiaron de color en la segunda manga y entre aciertos del argentino quien ganó (7/8) con el primer servicio y los errores de su rival quien obtuvo apenas (4/16) puntos con ambos saques Olivo quebró en el segundo, cuarto y sexto juego para nivelar set por lado.
El tercer set no tuvo nada que ver con los anteriores ya que los vaivenes en el dominio dejaron paso a un tenis de alto vuelo jugado por ambos. Una muestra de las dificultades por la que atravesaba el alemán la dio en el comienzo del tercer segmento cuando festejó una pelota larga del rosarino quien estaba 40-0 para ganar su séptimo juego consecutivo, cosa que finalmente logró luego del iguales y con un excelente drop shot. Kohlschreiber pudo quebrar en el tercer game pero el argentino recuperó la ruptura en el siguiente jugando un gran punto desde el suelo.
El alemán volvió a quebrar en el quinto juego y pareció que ese era el principio del fin ya que en el séptimo Olivo debió salvar un 0-40 y una cuarta chance de break para no quedar 2-5 y ahí comenzó la recuperación con mucha paciencia y atacando cada vez que tenía la oportunidad. Una doble falta del rosarino le dio el primer match point a Kohlschreiber en el noveno game pero logró salir airoso y en el siguiente aprovechó un error de su rival quien dejó la pelota en la red para igualar 5-5.
A partir de ahí las emociones llegaron a su punto máximo ya que Olivo ganó en cero su juego de saque asegurándose el tie break pero no hizo falta ya que rápidamente alcanzó la marca de 40-15 y con una pelota enganchada del alemán, que se fue afuera, logró la máxima victoria de su carrera y el mejor resultado ya que de estar jugando Challengers de 50 mil dólares ahora está en las semifinales de un torneo que reparte 1.4 millones de dólares en premios. En semis vendrá el uruguayo Pablo Cuevas pero eso es harina de otro costal, hoy es hora de festejar.

BAGNIS NO PUDO EN SUECIA 
El otro santafesino que buscaba las semifinales de un torneo ATP esta semana era Facundo Bagnis (93) quien no corrió la misma suerte de su comprovinciano cayendo con suma facilidad en cuartos de final del ATP 250 de Bastad ante el español Fernando Verdasco (59) por 6-2 y 6-1, en 1 hora y 8 minutos de partido. 
Los problemas del jugador de Amstrong a la hora de sacar, ganando menos de la mitad de los puntos jugados con el servicio, fueron la clave del abultado score final. Verdasco rompió en el primer y tercer game logrando una ventaja decisiva de 4-0 en el set inicial, y en la segunda manga repitió la ruptura en el comienzo y luego de salvar tres puntos de break, el español confirmó el break volviendo a romper en el quinto y séptimo juego para avanzar a las semifinales donde enfrentará al portugués Gastao Elías. 
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