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jueves, 16 de agosto de 2018

Snedeker anota el mágico número 59

El estadounidense Brandt Snedeker firmó esta mañana la espectacular tarjeta compuesta de 59 golpes (-11) que le permitió saltar a la cima del Wyndham Championship, evento que clausura la temporada regular (2017/2018) del PGA Tour.


Brandt Snedeker. (Getty Images)
El escenario de la proeza del estadounidense fue el Sedgefield Country Club, en Greensboro, Carolina del Norte, donde a pesar de arrancar con bogey su ronda matinal logró una espectacular seguidilla de cuatro birdies cerrando la primera parte del recorrido y los nueve hoyos finales cerró con 27 golpes donde además de seis birdies concretó un espectacular águila desde 180 yardas empleando un hierro 7 y embocando la pelota de aire al hoyo rompiendo incluso la boca del mismo por la potencia del impacto. Brandt desconocía que la pelota había entrado ya que no veía la bandera y de acuerdo a los aplausos supuso que el tiro era bueno y tomando el putt de la bolsa se dirigió supuestamente a jugar la pelota que descansaba dentro del hoyo.
El jugador de Tennessee, de 37 años de edad, salió a competir por el hoyo 10 donde luego de un mal tiro de salida el segundo golpe terminó en el rough no pudiendo embocar el putt desde dos metros para par. A partir del hoyo 13 donde embocó dos putts seguidos desde ocho metros para el birdie dejó la pelota dada para el tercero logrando el cuarto acierto en fila desde cuatro metros.
La magia continuó instalada en la bolsa del estadounidense en la parte final del recorrido arrancando con un hat-trick de birdies que le permitió tomar el control del leaderboard y donde el golpe más lejano ejecutado con el putt fue de poco más de un metro. Luego de un corto birdie en el par cinco del (5) vino la frutilla del postre en el par cuatro siguiente donde embocó desde el fairway alcanzando la marca de nueve bajo el par y a dos aciertos del número mágico.
En el par tres siguiente (224 yardas) Snedeker se pasó del hoyo haciendo retroceder la pelota y a poco estuvo de hacer hoyo en uno dejándola a 60 centímetros de la bandera para totalizar (-10) y cuando falló el corto putt desde menos de dos metros en el (8) que le hubiese permitido bajar los 60 golpes la desazón invadió por momentos la humanidad del estadounidense, pero sin dudas hoy era el día y luego de dos muy buenos tiros en el hoyo final la pelota quedó a seis metros de la bandera en el primer corte del green desde donde jugó con el putter embocando el décimo birdie del día que lo metió en la historia.
Backswing

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