El misionero Leandro Augsburger y el puntano Valentino Libaak alcanzaron la gloria hoy al clasificarse para disputar la final del La Rioja Pádel Open perteneciente al World Pádel Tour al derrotar a Miguel Lamperti y Juan Cruz Belluati 7-6 (7/4) y 6-3.
Por favor, no nos despierten. |
En otra soberbia performance los chicos argentinos lograron lo impensado días atrás al acceder como Wildcard a la definición de la competencia que se desarrolla en el Superdomo de La Rioja dejando en el camino a destacadas figuras del circuito internacional de pádel en apenas sus primeras presentaciones con 18 y 17 años de edad, respectivamente.
Los “veteranos” Lamperti y Belluati alertados del poderío de los nuevos Superpibes desplegaron toda su inteligencia y sapiencia para mantenerse en el partido y al principio ayudado por algunos errores de sus oponentes que justamente los cometieron debido a la falta de experiencia, pero con el correr del match fueron dando muestra cabal de que están para más ya que en el primer set debieron sobreponerse a un 3-5 en contra sacando sus adversarios para set e imponerse luego en el tie break y en el final de la segunda manga ocurrió algo similar y hoy fueron quebrados por única en vez en los cuatro enfrentamientos donde no han perdido sets aún.
El nerviosismo inicial de los chicos era previsible ya que en su primera temporada en el circuito y sin ranking para ingresar a los diferentes torneos vienen de perder en la final de la qualy de Abu Dabi, en la de Santiago de Chile y la de Paraguay por lo que era muy importante poder demostrar en Argentina, en calidad de invitados, todo su poderío y de golpe se encontraron con la chance concreta de alcanzar la final si ganaban y ello les jugó en contra, pero pudieron sobrellevarlo con altura.
COMIENZO COMPLICADO
Las cosas no arrancaron nada bien para los chicos ya que primero fue Libaak el que salvó dos breaks manteniendo el servicio en punto de oro y luego le tocó a Augsburger que si bien no llegó a la definición extra tuvo que lidiar con un 0-30 para ponerse 2-2. En el siguiente game le tocó a Lamperti pelear con dos puntos de break logrando también él aferrarse al saque en la definición del punto de oro.
Luego de que cerrasen en cero los dos siguientes puntos los servidores vinieron los primeros problemas serios para la dupla misionera-puntana ya que con Leo al saque se encontró con dos puntos de break y si bien sorteó con éxito el primero perdió el saque en punto de oro quedando 3-5 y permitiendo a Lamperti sacar para quedarse con el primer set, pero ahí vino la reacción de los chicos que se sintieron tocados en su amor propio recuperando el break en 15 y de la misma manera con Tino al servicio volvieron a igualar el marcador 5-5. Ganando los dos siguientes juegos en cero debieron recurrir al tie break para ver quien se quedaba con la primera ventaja.
El primer mini break ocurrió con Belluati al saque en el quinto punto que el misionero se encargó de confirmar alcanzando una ventaja de 5/2 y luego le robaron otro a Lamperti lo que le permitió al puntano sacar para partido 6/3.
En la primera chance Augsburger intentó cerrarlo con un smash pero Lamperti volando por el aire y con un golpe similar de revés contra la red la sacó por uno de los laterales y en el siguiente Libaak subió después de servir y luego de cuatro voleas en la red la enterró con el smash sacándola de la cancha para quedarse con el parcial en 53 minutos.
A PURA VOLEA Y SMASH
El inicio del segundo segmento volvió a ser complicado para ambos duetos ya que primero Leo debió convivir con dos situaciones de break y luego le tocó a Belluati que si bien no llegó a la definición extra sacó 0-30 y ganando los cuatro puntos siguientes igualó el marcador 1-1.
De ahí en más los servidores no tuvieron demasiado dolor de cabeza, a excepción del misionero en el quinto juego donde le tocó convivir con un 0-30 hasta que se produjo el tercer golpe de escena del partido donde con Lamperti al saque fueron quebrados repitiéndose la historia del set anterior con la salvedad de que ahora los actores fueron diferentes y los auténticos Golden Boys como se dijo por ahí quebraron y vendrían a servir para alcanzar la gloria, su primera final en otro nivel de pádel.
En el anterior parcial le tocó cerrar a Tino con su saque y ahora fue Leo el que debía encaminar el rumbo y lo hizo con autoridad y en 15 y en el punto decisivo el posadeño subió a la red y después de la primera volea vino el smash de derecha que le devolvió la pelota a su campo a pesar del esfuerzo de Lamperti que terminó enredado en la red y en el piso sin poder tocarla desatando la alegría propia de los chicos y de un estadio colmado que deliraba ante la hazaña de los nuevos Superpibes, o por ahora al menos Superpibitos.
El rival de Augsburger y Libaak en la final saldrá del enfrentamiento que sostendrán a segundo turno los actuales Superpibes Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno contra Agustín Tapia y Arturo Coello, segundos favoritos.
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