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sábado, 22 de septiembre de 2018

La magia del Tigre sigue intacta

Tiger Woods tuvo un espectacular comienzo de la ronda sabatina firmando otra tarjeta de 65 golpes (-5) que le permitió mantenerse en la cima del Tour Championship con un acumulado de 198 (-12) y aventajando por tres unidades a Justin Rose quien lidera la clasificación de la FedEx en la carrera por los 10 millones de dólares.


Tiger Woods. (Getty Images)
Un inicio de película posibilitó al Tigre marcar seis birdies en los primeros siete hoyos que lo separaron de su principal escollo a la victoria luego de cinco años de sequía y si bien en la parte final perdió efectividad y volvió a fallar en el hoyo 16 y solamente la magia que continúa intacta le impidió perder más de un golpe, pero Rose aprovechó ahí con el birdie para descontar dos de los cinco que los separaba en ese entonces. El inglés tuvo un comienzo complicado con dos bogeys consecutivos recuperándose luego y firmando una tarjeta de 68 golpes que le permiten ser el escolta junto a Rory McIlroy quien cerró con 66 y mañana compartirá el recorrido final junto al líder.
Las cosas no pudieron comenzar de mejor manera para Woods en el East Lake Golf Club ya que fue el primer día que arrancó con birdie y embocando un gran putt desde unos seis metros para comenzar a dispararse de Rose quien falló un corto approach y putt y en el siguiente empleó tres golpes arriba del green que rápidamente lo dejaron tres golpes debajo.
El Tigre comenzó a partir del hoyo 3 una seguidilla de cinco birdies consecutivos que le permitieron estirar a cinco la brecha con su compañero de ronda y no fueron más debido a que este también logró tres aciertos en apenas cuatro. A excepción del putt jugado en el (4) que fue de unos seis metros ninguno de los otros superó los dos metros y tanto el del par cinco del (6) donde debió jugar el tercero desde el bunker, en el siguiente también debió golpear desde la arena y en este caso desde un cross bunker donde recorriendo 170 yardas dejó la pelota a un metro y medio de la bandera para el sexto birdie.
En los primeros seis hoyos el estadounidense había acertado todos los fairways y de ahí en más debió trabajar cada hoyo y luego de enviar la pelota al rough en el (8 y 9) en el primero pudo salvar el par, pero en el siguiente falló el putt desde tres metros.
En la parte final Tiger falló apenas dos fairways y conectó (11/18) greens en la ronda y en el (12) logró otro gran segundo tiro desde 140 yardas dejando la pelota a dos metros de la bandera para recuperar el golpe perdido en el cierre de la ida. Un tercer error de Rose en el hoyo 14 le permitió estirar nuevamente a cinco.
En la víspera el yerro de Woods con el driver en el (16) fue a la izquierda y hoy a la derecha, pero el resultado fue el mismo haciendo desaparecer la pelota en el pasto alto y luego de dos malos tiros y cuando el doble bogey golpeaba sus puertas apareció la magia y jugando un gran cuarto tiro contra la loma del green dejó la pelota dada para bogey, aunque perdió dos golpes ya que el inglés logró ahí el birdie. En el cierre Woods se fue al bunker con el segundo golpe desde donde n o tuvo una buena sacada debiendo conformarse con el par, mientras que Rose, quien falló la salida a la izquierda no pudo salir del rough con el segundo y con el tercero dejó la pelota en el green para terminar también con par.

REMEMORAR VIEJAS ÉPOCAS
El ex número uno del mundo tiene la ventaja en 54 hoyos por primera vez desde su última victoria en el Bridgestone Invitational de 2013. Tiger nunca ha perdido un torneo oficial cuando lideraba por más de dos golpes en la ronda final, y su récord de cierre liderando es de (42-2) en el PGA Tour.
Woods nunca ha estado en una mejor posición para demostrar que ha regresado de cuatro cirugías de espalda que una vez le hicieron temer que nunca volvería a jugar. “He pasado por muchas cosas este año para llegar a este punto, hay que entender y luchar para superarlo”, dijo el moreno.
McIlroy será el compañero en el recorrido de mañana y se lo ganó gracias a una ronda casi perfecta comprendida por cinco birdies de los cuales dos fueron consecutivos en el inicio de la vuelta y dos en los últimos tres hoyos perdiendo apenas un golpe en el hoyo 7.
“Obviamente que es emocionante para el torneo. Es emocionante para el golf en general que esté en la pelea”, dijo McIlroy. “Pero yo, todo lo que puedo hacer es concentrarme en mí mismo. El juego es lo suficientemente difícil sin mirar a los demás. Sal mañana y ocúpate de tu propio negocio y espero que sea lo suficientemente bueno”, acotó el norirlandés.
Rose continúa siendo el número uno de la clasificación y hoy por hoy el dueño del bono de 10 millones de dólares de la FedEx, a pesar de igualar la segunda posición. Woods está segundo y Bryson DeChambeau, quien embocó el águila desde 100 yardas en el hoyo 17 y terminar con 66 golpes se ubica 21º con (+2) y clasifica tercero en la general.
Backswing

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