Una nueva figura emergió hoy en The Los Angeles Country Club ya que luego de arrancar prendido en la pelea por el título de la edición 123 del Major hoy supo mantener a raya a dos de los tres mejores del mundo, Rory McIlroy y Scottie Scheffler para ganar su segundo torneo en poco más de un mes.
Wyndham Clark arrancó el jueves con 64 golpes y en segundo lugar a dos del puntero Rickie Fowler, el segundo día se acercó a uno y hoy salió compartiendo el primer puesto junto a Rickie y con uno de ventaja sobre Rory y tres respecto de Scottie y terminando los tres en el par de la cancha los 18 hoyos finales las posiciones al comenzar la ronda final no se modificaron y consagraron campeón al estadounidense de 29 años de edad que venía de ganar su primer titulo en el PGA Tour los primeros días del mes pasado cuando triunfó en el Wells Fargo Championship y ahora se proyectó al 10º puesto en la FedEx.
Luego de arrancar con birdie el primer hoyo Wyndham y Rory, el bogey del estadounidense en el segundo hoyo dejó la cima brevemente compartida, pero dos nuevos birdies de Clark en los hoyos 4 y 6 lo volvieron a separar en lo más alto del leaderboard, a pesar de subir el par cinco del (8).
McIlroy nunca pudo dejarse chances claras de birdie, a excepción del muy corto fallado desde un metro en el par cinco del hoyo 8 y si bien acertó (12/13) primeros greens de todos ellos se iba con dos putts y luego de doce pares consecutivos que lo mantenían a un golpe del puntero, el par cinco del hoyo 14 marcó un antes y un después en la definición del tercer Major de la temporada ya que ahí era donde el norirlandés necesitó acertar el fairway con su golpe de salida, sin embargo lo falló hacia la izquierda debiendo jugar a buena y con tanta mala suerte que su tercer golpe terminó con la pelota incrustada en la pared de un bunker y a duras penas logró ubicarla semienterrada y luego de dropear falló el corto approach y putt desde el rough anotando el primero y único bogey del día.
Detrás suyo y en el fairway Clark se relamía viendo las penurias de su rival directo ya que los demás estaban a cuatro y más golpes y haciendo movimientos de calentamiento para no enfriarse ejecutó un soberbio segundo golpe desde el fairway y 280 yardas para poner la pelota en el green y desde cerca y con dos putts se llevó el birdie que ahora lo separaba a tres de su escolta con cuatro hoyos por jugar.
McIlroy debió embocar un putt para par desde dos metros en el hoyo 16 evitando el bogey de tres putts luego de fallar otra vez el golpe de salida y dejar el segundo a unos 17 metros del hoyo y de repente reverdecieron otra vez las chances de Rory ya que el líder falló un corto approach y putt desde dos metros en el par tres del (15) y en el siguiente repitió el bogey al mandar la pelota con el golpe de salida a un bunker donde solamente pudo jugar a buena y desde 130 yardas se dejó la chance de par desde dos metros que volvió a fallar para quedar otra vez a uno con un hoyo por jugar.
El segundo golpe de McIlroy en el (18) fue una réplica de lo que ocurrió toda la tarde ya que desde lejos debió contentarse con el par y Clark, que también alcanzó el green con dos tiros dejó dado su primer putt y con el corto segundo se consagró campeón desatando el festejo que se compuso de fuertes abrazos donde las lágrimas estuvieron más cerca que las risas.
Rory, ganador de cuatro Majors, siente que el quinto le están costando casi como el primero ya que hace nueve años del último que consiguió. “Cuando finalmente gane este próximo Major, será muy, muy dulce. Pasarían 100 domingos como este para tener en mis manos otro campeonato importante”, dijo McIlroy.
Rickie Fowler, que lideró los tres primeros días y compartió la cima en la ronda final nunca tuvo chances ya que arrancó con tres bogeys sus primeros siete hoyos y cuando logró el primer birdie que alimentó alguna oportunidad, en los nueve finales rápidamente vinieron dos bogeys seguidos que echaron por tierra la presunción anterior finalizando con 75 impactos y clasificando quinto con cinco bajo el par.
Scheffler, número uno del mundo cerró la primera parte con un birdie y un bogey, pero en los nueve finales dos errores seguidos (11 y 12) lo bajaron de la pelea y si bien logró dos rápidos birdies, el del (13) metiendo un larguísimo putt falló varios muy cortos que le impidieron pelear más arriba.
Cameron Smith finalizó cuarto con seis bajo el par y un escalón más atrás culminó Tommy Fleetwood con cinco menos siendo el mejor de la ronda final con 63 (-7) y con dos águilas en sus alforjas.
Gordon Sargent fue el medallista entre los amateurs clasificando 39º con cuatro sobre el par siendo por lejos el mejor de los cuatro que superaron el corte ya que Ben Carr (+13), Aldrich Potgieter (+15) y Maxwell Moldovan (+17) ocuparon tres de los últimos cuatro lugares.
Joaquín Niemann con tres sobre el par fue el mejor de los tres latinoamericanos que superaron el corte ya que Sebastián Muñoz totalizó seis sobre el par y Abraham Ancer terminó con más siete.
• Backswing
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