Un brillante Rory se lució en Canadá

Rory McIlroy se consagró brillantemente campeón del RBC Canadian Open al firmar una tarjeta final de 61 golpes (-9) que le permitió acumular 258 (-22) y aventajar por siete unidades a Shane Lowry y Webb Simpson. Sebastián Muñoz fue el mejor latinoamericano.

Rory McIlroy.

Una soberbia actuación en los 18 hoyos finales posibilitaron al jugador de Irlanda del Norte obtener su 16ª victoria en el PGA Tour de los Estados Unidos y la 25ª a nivel mundial superando por siete unidades a sus escoltas y de no haber fallado el approach y putt desde la arena en los hoyos 16 y 18 donde marcó los únicos dos errores del día se hubiese convertido en el 11º competidor en la historia del PGA Tour en anotar por debajo de 60 golpes, aunque recuperó esos dos golpes perdidos ahí con dos brillantes ejecuciones en el par cinco del (17) donde recorrió las 540 yardas que lo separaban del tee al hoyo dejando la pelota a 60 centímetros de la bandera para anotar el águila. El colombiano Muñoz fue el mejor latinoamericano clasificando 11º con 271 (-9).
McIlroy había cerrando con un brillante 69 ayer que le permitió salir liderando la ronda final junto a Matt Kuchar y Webb Simpson, pero un encendido comienzo donde registró cinco birdies en siete hoyos definió tempranamente el pleito a su favor y luego todo fue un idilio con el público que aclamó al brillante Rory quien retribuyó gentilezas al público local exhibiendo la camiseta número 7 de los Toronto Raptors de la NBA.
Un soberbio comienzo de tee a green posibilitó que Rory anote cinco birdies donde el putt más lejano que embocó para conseguir los aciertos fue de poco más de dos metros en el (7) sacando tres de ventaja sobre Kuchar quien fue el único que lo pudo seguir medianamente de cerca con dos birdies en los primeros nueve hoyos. McIlroy mejoró lo hecho ayer en el (1) ejecutando un drive de 353 yardas y luego de un corto approach dejó la pelota dada al hoyo para el primer birdie del día. En los hoyos 2 y 4 metió putts desde dos y un metro y dejando dada la pelota al hoyo en el (5) y el más lejano de los putts fue el del hoyo 7 donde dejó la pelota a poco más de dos metros.
Por si quedaban dudas de quien sucedería en el trono a Dustin Johnson, el europeo arrancó la parte final con cuatro birdies consecutivos a partir del hoyo 11 y nuevamente con un sólido juego de tee a green ya que nuevamente los putts no fueron más allá de los tres metros y el único lejano fue el del (14) donde metió desde nueve metros.
Con cuatro hoyos por delante Rory necesitaba de dos birdies más para anotar el mágico número 59, pero falló el tiro de salida en el par tres del (16) no pudiendo hacer dos golpes desde la arena perdiendo ahí el primer golpe, aunque dos brillantes ejecuciones en el siguiente le volvieron a dar vida ya que luego de consumar el águila necesitaba anotar tres en el hoyo final para conseguir la hazaña, pero nuevamente su pelota encontró la arena con el segundo golpe desde 190 yardas y la última chance desde el búnker se pasó dos metros de la bandera desde donde falló el par cerrando con el segundo bogey.
Finalmente, la pelea por el título fue un duelo entre irlandeses ya que Shane Lowry, quien compitió en el anteúltimo grupo junto a Kuchar y saliendo a un golpe de Rory, tuvo un prolijo andar marcando dos birdies en la ida y dos más en la parte final donde apenas realizó un bogey que lo clasificaba segundo en soledad, pero Simpson, quien jugó con el campeón terminó birdie-birdie para compartir la posición de escolta.
Kuchar (70) y Brandt Snedeker, quien registró 60 impactos el segundo día repitiendo además tres rondas de 69 compartieron la cuarta posición con (-13).
El colombiano Sebastián Muñoz tuvo un cierre espectacular logrando la segunda mejor marca de la última vuelta con 64 golpes (-6) clasificando 11º con 271 (-9) logrando mejorar 32 casilleros en el recorrido final. Sin cometer errores el colombiano anotó tres birdies en la ida y tres más en la parte final. José de Jesús Rodríguez finalizó un escalón debajo con nueve bajo el par luego de anotar 68 hoy producto de tres birdies y un bogey, mientras que Joaquín Niemann finalizó en el par clasificando 31º con (-5).
El mejor canadiense fue Adam Hadwin, quien cerró en el par la ronda final clasificando sexto con (-12). El local arrancó el recorrido final con muchas expectativas de convertirse en el primer canadiense en ganar el torneo desde 1954 debiendo conformarse con uno de los lugares para The Open Championship a jugarse en Royal Portrush en julio, privilegio que alcanzó también Graeme McDowell quien embocó un putt desde unos nueve metros para par en el hoyo final y clasificando 8º con (-10) se ganó un lugar.
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