El campeón saboreando el triunfo. (Gentileza ATP) |
“Dadas las circunstancias, he jugado probablemente el mejor partido de mi vida en polvo de ladrillo contra el número uno del mundo y el jugador a batir en esta superficie”, declaró Djokovic. “La forma en que jugué fue fantástica. Definitivamente estoy satisfecho con el rendimiento y el torneo en general.”
El número dos del mundo comenzó a todas luces su partido ante Nadal y con dos quiebres consecutivos se puso rápidamente 4-0 arriba en el marcador.
Nada iba a resultar fácil y el español se lo hizo saber al recuperar uno de los breaks pero Nole ganó en cero el séptimo y por ese entonces pareció que era suficiente.
El serbio cometió un error que le pudo costar caro cuando sacaba para set y con 30-0 regaló un smash para generarse tres chances de set. Nadal igualó el encuentro pero nuevamente el serbio quebró para esta vez si quedarse con la primera manga por 7-5.
INTENTO DE RECUPERACIÓN
El español nuevamente demostró por que es el número uno y haciendo borrón y cuenta nueva se quedó rápidamente con el saque del serbio.
Djokovic nunca estuvo en problemas como sí lo estuvo en el encuentro de semifinales ante el brasileño Bellucci, pero hasta esto le sirvió en la definición de hoy pues pudo entrenar por más de dos horas con un jugador zurdo y de similares características de juego.
El invicto de Nole no fue producto de la casualidad precisamente y jugando reiteradamente sobre el revés del español se fue haciendo espacios para jugar con su revés al lugar libre causando mucho daño al mallorquín.
Un nuevo quiebre le posibilitó al serbio extender a32 los partidos invictos de esta temporada y cortar la racha de Nadal, quien no perdía desde Roland Garros del 2009 cuando había caído ante el sueco Robin Soderling.
•Backswing
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