Hadwin logró su primer título

El canadiense Adam Hadwin se consagró campeón hoy del Valspar Championship totalizando 270 golpes (-14) y aventajando por uno al estadounidense Patrick Cantlay quien descontó los cuatro golpes en la ronda final pero el bogey del hoyo 72 le impidió ir a un playoff. 

Adam Hadwin. (Getty Images)

Hadwin jugó en gran forma durante toda la semana y hoy salió a disputar la ronda final con cuatro golpes de ventaja pero la primera victoria no es fácil de conseguir y si bien su rival tampoco nunca había ganado y necesitaba sumar 624,746 dólares en la temporada para asegurarse la tarjeta, los 680.400 obtenidos hoy le permiten dormir tranquilo durante varias noches. El campeón venía de un segundo lugar este año luego de salir como líder el último día y eso indefectiblemente te juega en la cabeza cuando las cosas no salen como uno quiere, pero se aseguró un lugar en el Masters de Augusta de este año, torneo que nunca jugó, aún a riesgo de postergar la luna de miel prevista en Tahití ya que contraerá enlace matrimonial el 24 de marzo, dos semanas antes del Masters.
“Sólo quería una oportunidad para ganar el último hoyo y tuve esa chance”, fueron las primeras palabras del campeón, quien tuvo todo controlado en la ronda final hasta que mandó el tiro de salida al agua en el hoyo 16 lo que le hizo anotar un doble bogey y perder los dos golpes que llevaba de ventaja.
Hadwin no tuvo un buen andar en la primera parte del recorrido ya que realizó un bogey y un birdie pero Cantlay, quien cumplirá 25 años de edad el próximo viernes, tampoco hizo mucho marcando dos birdies y un bogey siendo que era él el que debía arriesgar para achicar diferencias. La situación del ex número uno amateur del mundo no era sencilla ya que el de esta semana fue apenas su segundo torneo desde el 2014 cuando se fracturó la espalda.

ARREMETIDA DE CANTLAY
Las cosas tomaron otro color para el californiano en los nueve hoyos finales ya que logró cuatro birdies en cinco hoyos contra dos aciertos del canadiense en igual cantidad de hoyos que redujo a uno la diferencia entre ambos. Cantlay se dejó un putt de seis metros para birdie en el par cinco del 14, un poco más de un metro más largo que el de su oponente, pero pegó primero y luego del yerro del líder se acercó apenas a un golpe con cuatro hoyos por disputar.
La alegría le duró muy poco al estadounidense quien se fue al bunker con el tiro de salida en el par tres del 15 y si bien Hadwin tampoco acertó el green, su aproximación tampoco fue de las mejores ya que quedó a poco menos de dos metros corto de la bandera, pero Cantlay se pasó seis del hoyo y falló luego el putt para volver a quedar a dos luego de que su rival salvase el par.
A pesar de salir con la madera 3, el tiro desde el tee tomó más slice de lo querido y terminó en el agua del par cuatro del 16 lo que le terminó costando un doble bogey al canadiense y la ventaja que llevaba.

El festejo del final.

En el hoyo final los dos acertaron el fairway pero Cantlay falló el segundo a otro bunker y la historia del 15 se volvió a repetir ya que Hadwin se pasó un poquito del green y el estadounidense jugó desde la arena con el yerro anterior en su cabeza y esta vez dejó la pelota a cuatro metros pero corta de la bandera y luego de que el canadiense dejara corto en la línea del hoyo su tiro ejecutado con el canto del exploder, Cantlay falló su putt para par desatando el eufórico festejo de Hadwin después de embocar el corto putt para par.
Hadwin, por su parte, formaría parte de su primer Campeonato Mundial de Golf, que se disputará dentro de diez días, excepto por su boda, que es el viernes del Match Play. Habían planeado ir a la Polinesia Francesa para su luna de miel una semana después, aunque Hadwin había dicho que si ganaba tendría que posponer eso para ir “al lugar más verde de la tierra”.
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