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viernes, 25 de enero de 2013

Murray jugará la final en Melbourne

El británico se clasificó para enfrentar en la final del Abierto de Australia a Djokovic al superar en el Rod Laver Arena al suizo Roger Federer por 6-4, 6-7 (5/7), 6-3, 6-7 (2/7) y 6-2, en 4 horas de partido.


Andy Murray quiere el segundo.
(Gentileza sitio del torneo)
El encuentro fue muy parejo y disputado pero siempre con un leve predominio para el número tres del ranking quien fue más sólido con el servicio (conectó 21 aces contra cinco de Federer) y lo superó en tiros ganadores y cometió menos errores no forzados. En síntesis, su andar durante las 4 horas de partido tuvo menos fisuras que la del suizo quien falló demasiado con el segundo servicio, oportunidad aprovechada por el británico para generar 16 chances de break a lo largo del encuentro.
Un quiebre en el tercer game le dio rápidamente la ventaja a Murray para manejar el desarrollo del parcial ya que el helvético dispuso de una sola chance en el siguiente punto para recuperarse pero falló.
Federer mejoró en la segunda manga a partir de una mayor agresividad pero siempre fue superado por su adversario en tiros ganadores y también cometiendo menos errores no forzados. Sin oportunidades de quiebre debieron recurrir al tie break y luego de dos puntos perdidos por lado, Federer logró el set point con un gran revés cruzado que se complementó posteriormente con un error forzado del británico para quedar 1-1.

VUELTA A EMPEZAR
Al igual que en todo el partido, Murray acorraló al suizo en la esquina de su revés impidiéndole ser más agresivo con la derecha. El número dos salvó una chance de ruptura en el cuarto pero una desconcentración lo dejó rápidamente 0-40 en el sexto para terminar perdiendo el servicio y a la postre el parcial ya que no dispuso de chances para volver.
El cuarto segmento fue el más volátil de todos y fue el primero en que Federer pegó primero logrando una ventaja de 4-1 a partir del break conseguido en el cuarto punto pero ni ello le aseguró el control ya que volvió a ser quebrado en el 7°. La efectividad del británico (2/3) lo premió con un nuevo quiebre en el 11° permitiéndole sacar para match pero falló para ir a un nuevo desempate. Luego del cambio de lado Roger logró dos mini quiebres que le allanaron el camino ganando los últimos cinco puntos para volver a igualar el partido.
Cuando todo parecía a favor del suizo en lo anímico, Murray sacó a relucir toda su garra y con un rápido quiebre en el segundo punto, se puso 3-0 en apenas 12 minutos. Lo mejor del británico se vio en ese pasaje del partido ya que no se equivocó impidiendo la reacción de su rival quebrando nuevamente en el cierre para avanzar a la final. Murray tiene un solo título a nivel de Grand Slam y lo consiguió en el último que se jugó en el 2012, el US Open, precisamente ante el rival del próximo domingo: Novak Djokovic.
• Backswing

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