El argentino Sebastián Báez derrotó a su compatriota Camilo Ugo Carabelli por 6-1, 3-6 y 6-2 y mañana buscará su octavo título ATP en diez finales cuando enfrente al serbio Laslo Djere que derrotó al máximo favorito el también argentino Francisco Cerúndolo por 6-1, 4-6 y 6-3.
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Sebastián Báez. |
El rey del polvo de ladrillo, poseedor de siete títulos en nueve finales de 2022 a esta parte siendo el que más campeonatos ATP consiguió tratará mañana de repetir la hazaña de 2024 cuando se consagró campeón consecutivamente en Brasil y Chile. La semana pasada repitió el título en el ATP 500 de Río siendo el primer jugador en ganar dos veces y de manera consecutiva y mañana buscará sumar otro hito en su prolífica carrera y marcar un nuevo récord en la gira de tenis. El palmarés del bonaerense se compone de su primer título en Estoril (2022); Córdoba, Kitsbühel y Winston Salem (2023); Rio de Janeiro y Santiago de Chile (2024) y Río nuevamente este año. En 2024 Seba superó en la final al local Alejandro Tabilo y como sucedió en Brasil la semana pasada es el primer campeón que alcanza la final al año siguiente en el torneo trasandino y lo hizo nada más ni nada menos que con su victoria número 100 en el circuito y la octava consecutiva en suelo trasandino.
“Hoy fue una gran batalla. Es la tercera semana seguida que jugamos, tuvimos ambos altibajos y pude jugar mejor en el set final”, dijo Báez, quien siempre encuentra un plus para salir airoso ya que hace menos de dos semanas parecía estar en un profundo pozo sin poder alcanzar cuartos de final en un torneo durante siete meses y de repente vuelve y mete dos finales seguidas.
Báez dominó a su rival en el primer set logrando romper en el segundo juego y luego de convivir con dos puntos de break confirmó para una ventaja de 3-0. El bonaerense de San Martín volvió a quebrar en el sexto game y con su servicio concretó el segundo set point para quedarse con la primera ventaja en solamente 29 minutos.
En la segunda manga apareció otro jugador que conjugado con la reacción de Ugo Carabelli rápidamente se encontró en desventaja al ser quebrado en la tercera oportunidad del segundo juego y ahora fue él el que quedó 0-3. Seba pudo recuperar el quiebre en el quinto juego, pero lo volvió a perder otra vez con un andar muy errático pareciendo el clon del jugador del set anterior lo que posibilitó que Camilo con su saque iguale set por lado.
En el segmento decisivo apareció otra vez el campeón defensor en toda su dimensión y con una derecha paralela, la segunda, se generó dos situaciones de break en el cuarto game que concretó con una nueva derecha, aunque ahora invertida por marcar diferencias ya que luego de la confirmación estiró el marcador a 4-1.
Báez no tuvo inconvenientes en mantener el servicio a partir del quiebre y en el game final con Ugo Carabelli al saque generó cinco oportunidades de partido que pudo concretar finalmente gracias a dos errores del rival que falló por largas ambas pelotas.
CERÚNDOLO FUE UNA SOMBRA
En la primera semifinal un irreconocible Francisco Cerúndolo y no por jugar mal sino por no poder encontrar respuestas a sus yerros cayó sin atenuantes ante el serbio que simplemente se limitó a no cometer errores ya que de eso se encargó el argentino.
Fran arrancó con la oportunidad de quebrar a Djere en el segundo game dejando su chance con la pelota en la red y en el siguiente juego pasó de estar 40-0 con su servicio a terminar siendo quebrado en el principio del fin del set ya que nunca tuvo respuestas cediendo el saque nuevamente en el quinto y séptimo game y en 30 minutos ya estaba set abajo.
Cerúndolo cambió el plan de juego y comenzó a jugar pelotas al centro trasladándole la responsabilidad a su rival de generar juego y no solamente limitarse a esperar los fallos del otro y ahí encontró un pequeño resquicio hasta que en el séptimo game y después de ponerse 40-0 logró romper para 4-3 y en el siguiente y luego de estar 40-0 necesitó él de un cuarto game point para confirmar la ruptura que luego transformó en el set a su favor con su saque.
En el parcial final volvió el mismo Cerúndolo, quejándose, hablando consigo mismo, con su otro yo, con las fuerzas del mal y algún que otro enemigo invisible siendo consumido por los errores y rápidamente fue quebrado en el segundo juego para quedar 0-3 en un abrir y cerrar de ojos que marcó el final del segmento ya que si bien el argentino dispuso de una chance para recuperar el break en el séptimo juego en el siguiente debió convivir con dos puntos de match que Djere concretó en el siguiente con su saque en el segundo match point, el cuarto del enfrentamiento que duró dos horas.
• Backswing
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