Los Langers sean eternos

El veterano Bernhard Langer y su hijo menor Jason se consagraron campeones hoy del PNC Championship con un total de 119 golpes (-25). Tiger y Charlie Woods terminaron con la segunda mejor marca clasificando quintos.

 Jason y Bernhard Langer.

La regularidad del team Langer con rondas de 60 y 59 golpes posibilitó que el veterano alemán de 66 años de edad y 46 veces campeón en el Champions Tour consiga el quinto título padre-hijo, tres con Jason y otros dos con el hijo mayor Stefan. Bernhard igualó la mejor marca en cuanto a títulos conseguidos en el evento alcanzando a Raymond Floyd.

Una de las competencias más tiernas y emotivas del circuito de golf estadounidense que involucra tanto a padres y madres con hijos/as y hasta abuelos es el broche de oro de cada temporada y a pesar del día gris y frío con vientos de casi 50 kilómetros por hora los Langers volvieron a dar cátedra firmando la mejor tarjeta del segundo día compuesta de 59 golpes (-13) para descontar la desventaja de tres del primer día respecto del team Kuchar y terminar superando por dos al equipo integrado por David Duval y su hijo Brady que igualaron la mejor marca de la ronda final junto a los Woods compuesta de 61 golpes gracias al espectacular golpe final de Brady que desde unas 200 yardas dejó la pelota dada al hoyo para terminar con el águila que los clasificó segundos en soledad. El team Singh finalizó tercero con (-22).

Los Langers salieron a jugar la ronda final a tres golpes del equipo compuesto por Matt Kuchar, de 45 años de edad y su hijo Cameron de 16 años compartiendo el grupo final, pero el veterano alemán se complementó a la perfección con Jason arrancando con siete birdies consecutivos y rápidamente se apoderaron de la escena pasando a liderar con 19 bajo el par y aventajando ahora por cinco a los punteros de 18 hoyos que solamente pudieron anotar un birdie en la primera mitad.

Los nuevos punteros continuaron jugando en otra galaxia ya que luego de las lluvias matinales y que se mantuvieron desde la víspera, el viento y las bajas temperaturas no propiciaban precisamente tan buenos scores, a pesar del formato que permite conseguirlos ya que se elige el mejor golpe de salida y a partir de ahí ambos juegan el segundo y también el tercero.

Bernhard y Jason continuaron jugando con piloto automático y sin poder bajar el par tres del (8) sumaron tres birdies consecutivos más y luego del par en el otro hoyo corto (12) los líderes anotaron en los hoyos 13 y 14 la friolera de doce birdies en catorce hoyos, algo totalmente irreal que les dio cuatro golpes de ventaja.

Con la mayoría de los equipos ya finalizados la victoria parecía ser solamente un trámite para los Langers ya que el formato prácticamente elimina los errores, pero Brady Duval hizo un último intento al dejar su segundo golpe en el par cinco final jugado desde unas 200 yardas totalmente dada la pelota al hoyo para el águila que los acercó a uno.

Jason Langer no quería sorpresas y en el hoyo 16 embocó desde cuatro metros su aproximación al green para el último birdie que extendió a dos la brecha. En el par cinco final el niño hizo una “papa” con su segundo tiro eligiendo el del progenitor y el mismo Bernhard acercó la pelota al hoyo dejándose la chance de birdie desde un metro y medio, pero ambos lo fallaron, aunque el par fue suficiente para el quinto título y quedarse nuevamente con los tradicionales cinturones Old Tom Morris, además de una recompensa en metálico de 200 mil dólares.

LOS WOODS, MUY FELICES 

Sam, Tiger y Charlie, los Woods de parabienes.

La familia Woods estuvo de parabienes ya que Tiger volvió a disfrutar de la compañía de su hijo Charlie, que cumplirá 15 años en febrero próximo en lo que fue la cuarta presentación de ambos en el torneo y en esta edición con un sabor especial ya que la hija de Tigre, Sam, estuvo en la bolsa oficiando de caddie.

Tiger y Charlie no pudieron destacarse demasiado ayer lo que significó un contratiempo para el padre ya que es un competidor que no soporta no estar peleando los primeros lugares y esta tarde las cosas tomaron otro color ya que saliendo a siete de la punta cerraron muy bien la ida con tres birdies y un águila en el (5) y en el (9) Charlie logró uno de los golpes del día, junto al approach de Brady Duval en el final, embocando desde afuera el chip para birdie. Previamente Tiger había embocado un largo putt para águila en el (5) y su hijo puso la pelota en el green del hoyo 7 (349 yardas) con el golpe de salida para terminar con birdie.

En los nueve hoyos finales Los Woods arrancaron con birdie y a partir del (13) sumaron cuatro consecutivos más para terminar con el noveno birdie concretado por Charlie desde poco más de un metro.

Además de la competencia propiamente dicha, el Tigre pudo disfrutar de una excelente semana familiar, con golf, cenas y muchos momentos de buen esparcimiento.

Entre los equipos destacados debemos nombrar el de la sueca Annika Sörenstam con su hijo Will McGee, de 12 años y el del team Korda integrado por Nelly con su padre Petr, el ex tenista checo que fue número uno del mundo.

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